La industria nuclear europea está experimentando un resurgimiento notable. La crisis energética iniciada en 2021, y profundizada en 2022 con el conflicto en Ucrania, ha llevado a Europa a considerar seriamente la necesidad de una infraestructura nuclear robusta. Esta situación ha aumentado el respaldo hacia la energía nuclear frente a las alternativas «verdes». Varios países han declarado su intención de triplicar su capacidad nuclear en los próximos años, pero enfrentan un desafío significativo: la escasez de mano de obra cualificada.
Actualmente, la demanda de ingenieros y técnicos especializados en energía nuclear es enorme. Sin embargo, los países más interesados en esta expansión están encontrando dificultades para reclutar suficiente personal capacitado. Según Bloomberg, 25 naciones, muchas de ellas europeas, han anunciado planes ambiciosos para aumentar su capacidad nuclear.
Francia, el Reino Unido y Suecia son los líderes en esta iniciativa. Francia necesita alrededor de 100,000 trabajadores adicionales en la próxima década, pero EDF, la compañía de electricidad del país, estima que no podrán cubrir 25,000 de estos puestos. La industria nuclear francesa actualmente emplea a 220,000 personas, muchas de las cuales se jubilarán pronto.
A pesar del aumento en los proyectos de energía renovable, la reciente volatilidad en los precios de la energía ha resaltado la importancia de fuentes alternativas como la nuclear. Philippe Lanoir, presidente de industria y energía de la federación francesa Syntec-Ingenierie, subraya la urgencia de encontrar personal calificado para estos proyectos.
Francia planea construir entre seis y veinte nuevos reactores. El presidente Emmanuel Macron quiere que EDF construya seis reactores inicialmente, con un costo estimado de 70,000 millones de euros, y posiblemente expandir el proyecto a dos reactores adicionales. Marine Le Pen, en su campaña, propuso un plan aún más ambicioso de 20 nuevos reactores. Sin embargo, EDF enfrenta el reto de encontrar trabajadores cualificados, habiendo tardado 17 años en completar su última planta y recurriendo a trabajadores fuera de la UE.
El Reino Unido y Suecia también enfrentan problemas similares. El Reino Unido ha prometido cuadruplicar su capacidad nuclear para 2050 y estima que necesitará 123,000 nuevos trabajadores en la próxima década. Para ello, el gobierno británico y empresas como EDF, BAE Systems y Rolls Royce han destinado 763 millones de libras para mejorar la formación de su fuerza laboral. Amanda Solloway, ministra de energía del Reino Unido, destacó la importancia de contar con talento local para cumplir con sus ambiciosos planes.
Suecia, con seis reactores operativos, planea construir diez más antes de 2045 para satisfacer la demanda energética. Carl Berglof, coordinador de energía nuclear de Suecia, señaló la necesidad de decenas de miles de nuevos trabajadores. La educación en este campo es crucial, pero actualmente solo se gradúan entre 50 y 70 ingenieros especializados en energía nuclear cada año. Ane Hakansson, profesora de física nuclear, mencionó que aunque contratar trabajadores extranjeros podría ser una solución, la competencia con otros países como Francia y el Reino Unido complica esta opción.
En resumen, el resurgimiento de la energía nuclear en Europa depende significativamente de la disponibilidad de mano de obra calificada, un recurso cada vez más escaso en el mercado laboral actual.