La asociación empresarial Exceltur ha estimado que la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales, sin una compensación salarial proporcionada por el Gobierno, generará un impacto económico de 2.348 millones de euros en el sector turístico.
En un comunicado, Exceltur, que agrupa a importantes actores del sector como grandes cadenas hoteleras, aerolíneas, navieras, agencias de viajes, medios de pago, gestores de reservas y consultoras, ha expresado su preocupación por esta medida. La organización sugiere que la reducción de la jornada laboral debería ser tratada en la negociación colectiva específica de cada subsector.
El coste anual estimado de 2.348 millones de euros se basa en la necesidad de reducir las horas de trabajo en puestos que requieren presencialidad. Este cálculo supone que las empresas podrán encontrar trabajadores cualificados que optimicen los tiempos laborales y que cuenten con los recursos necesarios para gestionar los turnos de manera flexible.
Implementar esta reducción de horas aumentaría los costes laborales totales de las empresas en un 4,9% y reduciría sus beneficios anuales en un 8,1%. Subsectores como la restauración y el transporte terrestre de viajeros se verían particularmente afectados, con caídas en los beneficios del 19% y 17,3%, respectivamente.
Exceltur destaca que la negociación colectiva ha sido una herramienta eficaz para ajustar las condiciones laborales en España, permitiendo reducciones de jornada laboral. Sin embargo, señala que las características específicas de las actividades turísticas, donde la mayoría de los servicios son presenciales, dificultan el ahorro de horas de trabajo sin afectar la productividad. Muchas empresas podrían verse obligadas a reducir sus horas de operación, lo que reduciría sus ingresos y pondría en riesgo su viabilidad.
El Ministerio de Trabajo, en el marco del acuerdo de gobierno entre PSOE y Sumar, tiene como objetivo reducir la jornada laboral de las actuales 40 horas semanales a 38,5 horas este año y a 37,5 horas en 2025. Sin embargo, esta propuesta ha encontrado resistencia entre los empresarios, quienes han expresado su preocupación tras meses de debate.